Cuando las personas llegan a la realización de que sus debilidades pueden ser sus mayores fortalezas, se dan cuenta de que pueden mover montañas. Si hemos aprendido algo de la historia de David y Goliat, es que el desfavorecido puede derrotar al gigante cuando identifica las debilidades de su oponente y cuando juega según sus propias reglas. Las mismas debilidades que hacen que alguien sienta que no encaja o que no puede ganar pueden ser la fuerza motriz para sorprender a su oponente más fuerte y ganar el juego. ¡Recuerda que el desfavorecido solo pierde cuando juega según las reglas del gigante!
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La prevalente historia del desfavorecido que sale victorioso da esperanza a todos y demuestra que las debilidades de una persona a menudo son sus mayores fortalezas. La historia de David y Goliat muestra cuán importante es romper las reglas en el juego del gigante. Cuando David luchó contra Goliat, encontró la debilidad del gigante; su vista. Usando su velocidad y maniobrabilidad, pudo evitar la espada del gigante y romper las reglas con el único arma que no estaría al alcance del gigante. La mayoría de las personas no parecen poder implementar esta lección en la vida real porque ven al gigante como todopoderoso y creen que el campo de juego del gigante es el único terreno donde pueden competir. Cuando el desfavorecido finalmente se da cuenta de su poder y cómo cambiar el guion, puede ser victorioso.
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Baloncesto Femenino de Redwood City — Vivek Ranadive fue el entrenador del equipo nacional junior de baloncesto femenino. El equipo no podía ganar un partido, y él sabía que se debía a la inexperiencia. Al notar que cada equipo solo usaba 24 pies de toda la cancha, detectó la debilidad en el juego del gigante. Cuando el entrenador entrenó a su equipo para hacer una presión en toda la cancha, su equipo ganó. Este movimiento sorprendió a los otros entrenadores, dando a su equipo la ventaja.
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El Salón — En 1874, todos los artistas querían que su trabajo se viera en el Salón de París, Francia, conocido por mostrar el mejor arte del país. El Ministerio de la Casa Imperial y Bellas Artes despreciaba el arte impresionista en favor de la precisión, obligando a los artistas a conformarse con sus reglas. Cuando los impresionistas franceses, Renoir, Monet y otros, se cansaron de jugar según esas reglas, crearon su propia galería de arte, donde más de 3,500 personas se presentaron, marcando el comienzo de la era impresionista.
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El sociólogo Samuel Stouffer dijo que las personas se miden en comparación con los demás versus cualquier otra medida. Las teorías de la curva "n" y el pez pequeño en un estanque grande muestran que ser más grande no siempre es mejor.
La curva "n" — La teoría de la curva "n" postula que demasiado puede ser tan malo como muy poco. Esto se aplica a casi todo, y sorprendentemente a la riqueza. Muchos creen que más dinero equivale a más felicidad, pero según la curva "n", un ingreso de $75,000 se sitúa en la cima de la "n". Cualquier lado, ya sea más dinero o menos dinero, no hizo a alguien más feliz.
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Esta teoría también se aplica al tamaño de la clase. A menudo se dice que un tamaño de clase más pequeño es mejor, ya que da a cada estudiante más atención, pero una clase que es demasiado pequeña carece de interactividad entre pares y diversidad. Por lo tanto, un tamaño de clase de 3 es tan malo como tener un tamaño de clase de 40, donde la diversidad es abundante, pero la atención es escasa
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Pez pequeño, estanque grande — La comparación de un pez pequeño en un estanque grande versus un pez grande en un estanque pequeño es un dilema que muchas personas han enfrentado. La historia de Caroline Sachs nos da una idea de cómo puede desarrollarse esto. En la cima de su clase, Caroline era un pez grande en el estanque de su escuela secundaria. Cuando fue aceptada en la Universidad de Brown y la Universidad de Maryland, tuvo una elección difícil. Como la mayoría de los estudiantes en su situación, Caroline eligió Brown. Ella conocía el poder que tendría en su currículum. Cuando llegó allí, se convirtió en un pez pequeño en un estanque grande de superdotados. Luchó con su especialidad y se encontró cambiando a algo que no era su pasión. Esto la afectó por el resto de su vida.
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Un fenómeno natural ocurre cuando perdemos un sentido. Otros sentidos se realzan. Un hombre ciego tiene un mejor sentido del oído. Una persona en silla de ruedas puede tener una fuerza extraordinaria en la parte superior del cuerpo. Esto se conoce como Aprendizaje de Compensación. Richard Branson, el fundador de Virgin Group, David Boies y Gary Cohn todos sufrieron de dislexia pero se convirtieron en los mejores en sus campos utilizando su debilidad a su favor, y sobre-desarrollando otras habilidades para impulsarlos a la cima de la grandeza.
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David Boies — El abogado David Boies sufrió de dislexia, lo que le hizo escuchar extremadamente bien y memorizar cosas. Como abogado, ahora puede escuchar la debilidad en las voces de otros abogados, detectando la más mínima diferencia en la tonalidad, lo que le ayuda a ganar casos.
Gary Cohn — El presidente de Goldman Sachs también era disléxico. Estaba acostumbrado a fracasar, lo que le llevó a tomar más riesgos. Con nada que perder, se subió a un taxi con un corredor de bolsa de alto nivel y pudo convencer al hombre de que era un comerciante exitoso. Terminó con un trabajo que le llevó a su riqueza.
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Nietzche acuñó la frase "Lo que no nos mata nos hace más fuertes". Las personas se dividen en tres grupos cuando algo malo sucede, similar a los resultados de una bomba cayendo en tiempo de guerra. Hay quienes son impactos directos y perecen, luego están aquellos que están lo suficientemente lejos para no verse afectados, y por último están los que casi son alcanzados. Son los que casi son alcanzados quienes se empoderan.
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La mayoría de las personas exitosas han pasado por adversidades:
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La moraleja de la historia es que a través de la adversidad construimos fuerza, a través de la debilidad, fortalecemos otras habilidades, y cuando nos atrevemos a jugar según nuestras propias reglas, derribamos a ese gigante en su proverbial trasero.